martes, 21 de marzo de 2023

El padre de Emmi Pikler

 Emmi Pikler,  pedagoga, (9 de enero de 1902 - 6 de junio de 1984 ) fue una médica formada en Viena que se instaló como pediatra en Budapest en los años 1930. 

Es también conocida por ser diseñadora de juguetes para niños. Su padre era ebanista.

Casa-Cuna de Emmi Pikler de la calle Lóczy 4 de Budapest

Para saber más:

https://docplayer.es/118489433-Pedagogos-creadores-pedagogas-creadoras-emilie-madleine-reich-emmi-pikler.html


jueves, 16 de marzo de 2023

Las aventuras de Caraculianos: Un cuento infantil que despierta la imaginación

 Para generar este cuento utilicé la app Writesonic. Es una inteligencia artificial tipo ChatGPT. El programa me pidió una introducción y cuatro esquemas o "secciones". Escribí lo siguiente:

Intro: Los caraculianos viven en un país llamado Caraculia. Tienen cara de culo. Hablan mediante pedos y comen por su boca que está en donde nosotros tenemos el culo. Es el mundo al revés

Esquema 1 Los caraculianos comen de todo porque sus madres ponen la comida en la silla en vez de en la mesa para que se sienten sobre ella

Esquema 2 Es muy divertidos escucharlos hablar mediante pedos. 

Esquema 3 Cuando hablan mucho huele mal. Sienten verguenza por eso

Esquema 4 Una niña que quería ser amigo de ellos se pone mentol debajo de la nariz para poder jugar sin que el olor le moleste

Lo que generó el programa es lo que sigue: 

Añadió una foto pero no tenía nada que ver con un caraculiano. Existe una foto de un caraculiano, que publiqué en 2011. Así que en esta entrada la voy a volver a poner



¿Has oído hablar alguna vez de los Caraculianos? Son un grupo único de criaturas que viven en un país llamado Caraculia. Los caraculianos tienen una característica inusual: tienen cara de culo. Así es. Su cara está donde está nuestro trasero, hablan por los pedos y comen por la boca. Es un mundo al revés, y su forma de vida es muy diferente a la nuestra.


Los peculiares hábitos alimenticios de los caraculianos

Los caraculianos comen de todo porque sus madres les ponen la comida en la silla en vez de en la mesa para que se sienten. ¿Te lo puedes creer? Se sientan en la comida y se la comen. Es extraño, porque estamos acostumbrados a sentarnos en una silla y comer en una mesa. Los caraculianos, en cambio, se sientan sobre la comida y se la comen. No utilizan utensilios como nosotros. Utilizan la boca para coger la comida y tragarla entera.

Es un espectáculo gracioso y divertido. Es inevitable reírse de cómo comen. No se dan cuenta de lo extraño que es, y por eso resulta tan cómico. Son felices con su modo de vida, y eso es lo único que importa.


El lenguaje de los pedos

Lo más sorprendente es cómo se comunican los caraculianos. Hablan a través de los pedos. Sí, has leído bien. Se tiran gases para transmitir sus pensamientos y sentimientos. A nosotros nos puede parecer asqueroso, pero para ellos es una forma normal de comunicarse. Ni siquiera se dan cuenta de lo inusual que es porque es todo lo que han conocido.

Es toda una experiencia escucharles hablar. Nunca sabes lo que van a decir, y el sonido de sus pedos es divertidísimo. Es como un lenguaje secreto que sólo ellos entienden. Aunque no es algo a lo que estemos acostumbrados, sigue siendo una forma de comunicación fascinante.


El olor de hablar demasiado

Sin embargo, su forma de comunicarse tiene un inconveniente. Cuando hablan mucho, huele mal. Se avergüenzan de ello e intentan evitar hablar demasiado. Es una pena, porque les encanta comunicarse, pero el olor puede ser abrumador. No quieren ofender a los demás con su olor, así que intentan que sus conversaciones sean breves.

Es una pena porque tienen mucho que decir, pero el olor les limita. Intentan disimularlo con perfume, pero no funciona. El olor sigue ahí, y es un recordatorio constante de su inusual forma de vida.


Una niña que quería ser su amiga

Un día, una niña estaba jugando al aire libre cuando se topó con un grupo de caraculianos. Le fascinaron sus caras de asno y su peculiar forma de comunicarse. Quería ser su amiga, pero el olor era demasiado para ella.

Decidida a hacer amigos, se le ocurrió una solución. Se puso mentol debajo de la nariz para bloquear el olor. Y funcionó. Pudo jugar con los caraculianos sin que le molestara el olor.

Los caraculianos estaban encantados de tener un nuevo amigo, y la niña estaba encantada de haber hecho amigos tan poco comunes. Disfrutaron jugando juntos y comunicándose a su manera.


Conclusión

Las aventuras de Caraculianos no es el típico cuento infantil. Es una historia de amistad y aceptación. Enseña a los niños a aceptar las diferencias y a encontrar puntos en común con quienes son distintos de ellos.

Puede que los caraculianos tengan cara de culo y se comuniquen a través de pedos, pero aun así son capaces de entablar amistades duraderas. Es un recordatorio de que nunca debemos juzgar un libro por su portada y de que siempre debemos estar abiertos a nuevas experiencias.

Así que, la próxima vez que se cruce con un caraculense, no tenga miedo de saludarlo. Nunca se sabe qué tipo de aventura le espera.

Frailejones del Kilimanjaro

 Las plantas o los animales que son fósiles vivientes transmiten un nosequé de tristeza. 

Los frailejones del Kilimanjaro, Dendrosenecio kilimanjari, son similares a los frailejones que se pueden ver a partir de los 4000 m en los Andes ecuatorianos. Son más grandes. 

Los frailejones de los Andes ocupan las alturas de esta cordillera que va desde el sur de Chile hasta el occidente venezolano. Los del Kilimanjaro están aislados. El volcán africano se yergue majestuoso en las llanuras calcinadas de Tanzania. Por ese motivo, desde que esta planta colonizó el volcán cuando éste se enfrió, no tuvo la ocasión de intercambiar genes con otras plantas de los alrededores. Quizás esa es la razón del gigantismo que presenta.

Cuando no interactúas te vuelves raro. Hay algo en ti que muestra tu aislamiento. Tus manías

Para saber más

miércoles, 1 de marzo de 2023

El mejor truco de magia del Mundo

 Luis Piedrahita es un cómico y mago de Coruña. Verle las pintas y la manera de hablar y sabes, porque eres de allí, que el tipo estudió en los jesuitas. Hay algo que les caracteriza. Debemos recordar que los jesuitas son un corporación ambiciosa e inculcan a sus pupilos a buscar el impacto en la sociedad. Es una de las formas de influir que ellos tienen. Nunca se les va del todo a aquellos que han estudiado con los herederos de San Ignacio de Loyola.

Pues bien, Luis Piedrahita, con ese tono del que está contando cosas muy importantes, nos cuenta que el mejor número de magia que ha visto es uno en el que el mago hace subir a una persona del público. Le pregunta en qué trabaja -soy electricista- contesta el voluntario. El truco consiste en leerle una carta de su madre. De repente, y según Piedrahita ahí está la grandeza de este truco, es que un anónimo electricista, en las palabras de su madre se convierte en un niño objeto del cariño de una madre. ¿Qué bonito verdad?

Podemos pensar que este truco es genial porque nos enseña que todos somos seres humanos, que una etiqueta como "electricista" no nos define. Las personas somos más que dos o tres adjetivos. Digo podemos porque viniendo de la mano de un mago sabemos que hay detrás manipulación. Obviamente la carta no será de la madre del espectador voluntario, por lo tanto, tampoco ese texto pertenece a su madre, pero el mago consigue que el electricista lo crea y también la audiencia del teatro. De esa manera, la etiqueta "electricista" se diluye en los matices que la palabra hijo tiene en el discurso de una madre. Aunque no haya ni madre ni tía ni nada que se le parezca. 

Los gurús de las sectas coercitivas, utilizan este número de magia. Por eso buscan que les llames padre, maestro, madre. El o la seductora busca también hacerte sentir único: "Llueve y hoy me alegra que llueva porque a ti también te moja y ahora es lo único que tenemos en común". Después de que sales de la secta o que eres abandonado por el seductor tienes claro todo lo que has dado y lo que han sacado de ti. 

Existe el truco de magia al revés. Y es algo parecido a la magia de un divorcio. El prefijo ex- deshumaniza más que definir a una persona solo por su profesión. Al menos, el electricista te puede arreglar una instalación eléctrica. Las actividades que las personas hacemos por dinero tienen bastante mágia. Me explico, tu ves a una persona por la calle y es un desconocido. Te dicen que esa persona es electricista y si se te ha estropeado el aire acondicionado le puedes pedir que venga a tu casa y lo arregle. Acuérdate siempre de preguntar precio primero. No te vayas a llevar una sorpresa. 

Voy a poner dos ejemplos de este tipo de relaciones. Utilizaré la terminología que se usa para entender el narcisismo. ¿Por qué profundizar en el narcisismo? porque es una tendencia actual en la sociedad que va a más. El primer tipo de relación en donde alguien te descubre como una persona especial se denomina "bombardeo de amor". Cuando llegué a Quito, una chica me vió y decidió que yo tenía que ser para ella. Se esforzó en que fuese así. Yo tenía muchas resistencias. Ella me hablaba de "dejarse domesticar" utilizando la analogía del Principito de Saint Exupery. Al tiempo de dejarnos escribió en su blog una entrada "Despedida" que comenzaba por "Te libero de mi". Domesticación, liberar... 


Ella no quería entender que yo tenía vínculos que no estaba dispuesto a perder. 

El segundo mecanismo de relación en el que se te anula, llamémosle "descarte narcisista" se dió con una pareja de amigos que teníamos en Ann Arbor. Cuando regresamos a Galicia la relación se cortó. Intenté mantenerla y un año ellos vinieron a casa de los abuelos en Porriño, otro fuimos a Mallorca a visitarlos. Cuando después de muchos intentos percibí que siempre era yo el que hacía por comunicarme se lo dije directamente a lo que me respondió: "yo nunca llamo, si me llaman contesto, pero si no me llaman yo no llamo". Lo dijo como si fuese una regla de oro de su personalidad. Algo valioso. La palabra reciprocidad no entraba en esa ecuación. Dejé de llamarle y la amistad se desvaneció en el tiempo.

Las interacciones se pueden clasificar en cuatro

Figura 1. Básicamente entre dos individuos A y B pueden darse 4 tipos de interacciones: competitiva, parasítica, simbiótica y pluricelularidad. En la relación competitiva, tanto A como B mantienen cada uno de ellos su individualidad. En la relación parasítica, A sustituye una parte de B y vive a sus expensas pero retienen su individualidad. En la relación simbiótica, la unión implica la muerte de los integrantes o la desaparición de la estructura que surgía de la unión de A+B. Estoy pensando por ejemplo en un líquen. La coerción es un tipo de interacción que se dan en sectas coercitivas Es el tipo de interacción que se da en una colonia de insectos sociales, o es el cuerpo de un ser pluricelular, es decir, un montón de células somáticas, de adeptos o de obreras trabajan para el beneficio reproductivo de unas pocos elementos, las células sexuales.

Las relaciones basadas en el dinero son competitivas y también parasíticas. Las relaciones basadas en los pactos, lealtades, el conocimiento del otro son más propias de la simbiosis, la cooperación y pueden llegar a ser coercitivas, es decir, que pierdas tu individualidad por estar integrado en el grupo.

En las relaciones competitivas extremas, en donde A se come a B lo mejor es que A no conozca a B. Cuanto más anónimo sea B más fácil es comérnoslo. En cambio, las simbiosis, la cooperación, el pluralismo requiere conocimiento de ambas partes y control, mucho control. 

Video 1: ¿Nos comemos a nuestra mascota?

La verdad os hará libres

"La verdad os hará libres" es una de las frases más conocidas de Sócrates que sintetiza la importancia del conocimiento para nuestra evolución. Cuando Sócrates escribió esto, hace 2500 años, solo los sabios podían acceder a la información vía oral o a través de los escasos escritos que existían. Hoy en día, la información está en todos lados. Adicionalmente, se ha formado una potente industria de propaganda, marquetin, desinformación y manipulación. Tendemos a pensar que quién se interesa por nosotros, quién dedica su tiempo a conocernos es por que en realidad nos quiere. 

Las sectas coercitivas utilizan las técnicas de control mental para convertir a sus adeptos en esclavos de una élite. Sería una interacción de tipo coercitivo en donde unos pocos controlan a muchos. El conocimiento en este tipo de interacciones sigue tres principios: uno es conocer al adepto, mediante test psicológicos, sesiones de confesión... y el segundo es el aislamiento del núcleo social y familiar y el tercero consiste en charlas del líder explicando las bondades de la organización, sesiones de cánticos repetitivos y una dieta baja en calorías que aunada a sesiones de trabajo maratonianas mantienen los niveles de consciencia en mínimos. De esa manera, sin no hay consciencia no hay crítica.

Pensamos que el conocimiento nos libera. Es un lugar común que procede del tiempo de la ilustración francesa. Para Heidegger, el filósofo alemán, libertad significa “unión con la ley del espíritu del pueblo, la que se expone ejemplarmente en las obras del poeta, del pensador y del político”, libertad no es otra cosa que “responsabilidad con el destino del pueblo”. Esta idea tan extraña tiene que ver con su idea del poeta y el filósofo como mediadores entre el pueblo y las fuerzas ocultas, los dioses. Es decir, el conocimiento, encarnado en la persona del filósofo, tiene que guiar a los individuos desprovistos de su individualidad para pertenecer a un colectivo: el pueblo. Lo que propone Heidegger es lo que conocemos por gurú.

Video 2: Encuentro filósofico deportivo de los Monthy Python.  Los geniales humoristas se ríen de la manía patética que tienen los filósofos alemanes en considerarse herederos del mundo griego. Al final los griegos les meten un gol.

Es necesario algo más que el conocimiento para ser libres. Una de las características de la libertad es poder escapar, viajar, interactuar con otros. Ponernos en lugares en donde nunca hubiésemos imaginado estar. No es el conocimiento, es la interacción con otros lo que nos libera. Tener una pluralidad, variedad y libertad en nuestras interacciones. Interactuar nos permite conocer nuestros límites, exponernos ante retos éticos... Si el señor Martín Heidegger hubiese abandonado su cátedra de la Universidad de Friburgo y se hubiese ido a trabajar a una cervecería, quizás hubiese tenido la oportunidad de ver a los matones de la SA nazi y darse cuenta de que no, de que sus ideas románticas casaban mal con la realidad de los puños y las porras.

Don Quijote es el sueño de Sancho Panza

El mejor truco de magia no es convertir a un espectador anónimo, por ejemplo un electricista, en un hijo, en una persona de carne y hueso en la carta de una madre creada por un ilusionista. Tampoco el anular a una persona, demonizándola, alienándola. El mejor truco de magia del Mundo fue el que hizo Cervantes haciendo que un personaje, Sancho Panza, dejase de ser un campesino común y corriente, para convertirse en un aventurero, cuando se unió a otro personaje, su alter ego, Don Quijote, que con su locura interaccionaba con el exceso de sentido común del campesino manchego.

No se puede llamar amor, pero si aventura. Cuando te unes a tu alter ego, a esa persona que es como un segundo yo, muy distinto a tu personalidad. Su alteridad, lo que la hace distinta a ti, hace que a partir de ese momento de unión comiencen a ocurrir cosas. Ocurren cosas porque lo diferente que hay en ella o en él, de alguna manera te interpelan, te cuestionan, y la realidad se trastoca. Ya no vives en medio del campo de la Mancha, lo que ves a la lejanía no son molinos de viento, son gigantes y por eso mismo tienes que vencerlos.

Por lo tanto, en el amor, no es la competición, ni la manipulación, el tipo de interacciones deseables. La competición es destructiva, la manipulación te aliena. El amor es respetar los límites del otro y al mismo tiempo, viéndote reflejado en ese alter ego como en un espejo, buscar su alma tanto como a la tuya propia.
Fig. 2. De las primeras referencias al "alter ego" que se conocen es el discurso X, de los setenta y un discursos conservados del rétor del siglo IV d. C. Himerio de Prusa. En ellos describe su reacción al conocer al alumno que ahora despide y afirma que, viéndose reflejado en él como en un espejo, buscó su alma como a su «otro yo». Dice el texto: "… un sentimiento semejante experimenté también yo acerca de este joven. Pues, viendo aparecer en su alma, como en un espejo, una imagen de mi propia manera de ser, me alegré y por esto deseé y busqué su alma como a mi otro yo". Fuente

Seguiré escribiendo sobre esto, porque por fin he entendido un cuento que me ha obsesionado durante años. Como reflejo de ello, he escrito sobre él en varias entradas, incluso en este mismo blog. Ahora ya se el porqué.